Con esa
frase puse punto y final a mi anterior publicación y con esa misma frase quiero
comenzar esta. Y es que, siguiendo un poco la estela de lo que hablé en mi
anterior entrada, hoy me gustaría hablar de la amistad y de esa gente que “te
quiere”, pero sólo una temporada.
Existen
diferentes tipos de amor. El amor que sientes hacia tu madre, el amor que
sientes hacia tu mascota, el que sientes hacia tus amigos, el que sientes hacia
tu pareja o simplemente, aquel que sientes hacia un objeto que te trae muchos
recuerdos y del que no te quieres desprender…
Como ves,
existen muchos tipos de amor, diferentes entre sí. Es obvio que el amor que
sientes por una madre es totalmente diferente al que puedes sentir por tus
amigos, o por ejemplo, por tu mascota.
En esta
entrada me gustaría explicaros una situación personal que he vivido durante
este verano relacionada con este tema, en este caso hablo de la amistad.
Hace unos
meses conocí en Twitter a una persona. Comenzamos a hablar por mensajes
privados y con el tiempo se ganó mi confianza y mi aprecio. Hablábamos todos
los días y se preocupaba por mí, al igual que yo también me preocupaba. Hablábamos
por teléfono y reíamos mucho, lo pasábamos bien. Decía que me quería y que era
su mejor amigo, aún estando lejos.
Lo gracioso
de todo esto es que de un día para otro cambió, dejó de ser una persona con la
que daba gusto hablar a ser una persona fría y en ocasiones borde. Dejó de
hablar como hablaba antes y comenzó a hablar con monosílabos, como si le diera
pereza hablar conmigo.
Le abrí
conversación hasta tres días seguidos y su actitud seguía siendo la misma,
dejaba muchísimo que desear... A día de hoy, tan “importante” que era, todavía
no ha tenido tiempo a mandarme un simple mensaje.
Este sólo es
un ejemplo de alguien que “QUIERE” por temporadas. Y como este, muchas otras
personas fugaces que han pasado por mi vida a lo largo de estos años.
Personas que
dicen que te “quieren” (aunque cada vez lo dudo más), personas que te “apoyan”,
personas que “están ahí”… pero sólo una temporada. Tiempo suficiente hasta que
encuentran a alguien mejor, al que querer otra temporada más, o simplemente,
hasta que se cansan de ti o han conseguido lo que venían buscando.
Estoy seguro
de que tú también has conocido a alguien así, estoy seguro de que por tu vida
también han pasado este tipo de personas, personas que te han “querido” una
temporada y luego de la noche a la mañana, han desaparecido de tu vida.
Igual yo soy
demasiado raro, igual yo todavía no he aprendido a querer por temporadas…
porque cuando quiero a alguien, le quiero de verdad.
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